¿Cómo entendemos la terapia psicológica?

Para entender cómo funciona una terapia psicológica, es fundamental considerar la existencia de conflictos emocionales internos producido por tensiones o contradicciones entre diferentes deseos, necesidades, valores, creencias o expectativas. Estos conflictos son los responsables del malestar psicológico y los comportamientos disfuncionales que mostramos las personas. Si la perturbación emocional fuera consecuencia directa únicamente de las dificultades que se presentan en nuestras vidas, sería suficiente con aconsejar a la persona la mejor forma de comportamiento para resolverlo.

No debemos, sin embargo, confundir el proceso de terapia psicológica con un proceso de catarsis emocional, asesoramiento, orientación o apoyo psicológico. La psicoterapia tiene como objetivo anular o contrarrestar los efectos negativos de este conflicto interno, a través del desarrollo de una comprensión más profunda de uno mismo y de los problemas subyacentes.

Esta dinámica puede ilustrarse con un sencillo ejemplo. “Durante un vuelo, el avión atraviesa una zona de turbulencias severas que causa miedo y estrés entre los pasajeros. A pesar de que todos los pasajeros experimentan la misma turbulencia, no todos desarrollan una fobia a volar o síntomas de estrés persistente”. Esta diferencia en las reacciones de los pasajeros se debe a la presencia de conflictos internos que afectan la forma en que cada individuo procesa y maneja la situación. En psicoterapia se trabaja principalmente sobre esas diferencias individuales.

«Cuando ya no somos capaces de cambiar una situación, nos encontramos desafiados a cambiarnos a nosotros mismos.»

Viktor Frankl