Descubriendo a las personas altamente sensibles (PAS)

por | Feb 4, 2025

Una guía amigable para comprenderse mejor

Hay personas que sienten las emociones con una intensidad especial, notan pequeños detalles que otros pasan por alto y se ven profundamente afectadas por los entornos que las rodean. En este blog te explicaremos de forma sencilla qué es una persona altamente sensible y cómo puedes cuidar tu bienestar aprovechando tu sensibilidad emocional de manera positiva.

¿Qué significa tener características de PAS?

El término PAS fue introducido por la psicóloga Elaine Aron en los años 90 y describe a personas con un sistema nervioso más sensible de lo habitual. Esto significa que procesan la información sensorial y emocional de una manera más profunda. Según la autora, se trata de una característica de la personalidad que afecta aproximadamente al 20% de la población. Es importante aclarar que no se trata de una enfermedad ni un trastorno psicológico, por lo que no es posible realizar un diagnóstico formal. No está incluido en ninguna guía diagnóstica internacional, por lo que tampoco existen pruebas psicométricas estandarizadas para evaluar este rasgo de personalidad. A pesar de ello, este término puede servir como una guía para conocer mejor algunos aspectos de nosotros mismos. Experimentar características de la personalidad altamente sensible implica:
  1. Una gran profundidad emocional: reflexionar sobre sus sentimientos y los de los demás.
  2. Alta empatía: captar fácilmente las emociones de las personas de nuestro alrededor.
  3. Sensibilidad sensorial: ser más conscientes de algunos estímulos como luces brillantes, ruidos fuertes o texturas.
  4. Tendencia a la sobreestimulación: procesar excesiva cantidad de información, lo que puede resultar agotador en entornos ruidosos o muy activos.

Tener características PAS: una combinación de retos y fortalezas

Como todo en la vida, tener una personalidad altamente sensible tiene sus luces y sombras. Entender ambas partes te ayudará a equilibrar mejor tus emociones y a aprovechar tus cualidades. Algunos de los retos que enfrentan este tipo de personas son:
  1. Sobrecarga emocional: sentir intensamente, puede llevar a agotarse con rapidez, especialmente si no das espacio para el descanso.
  2. Dificultades para poner límites: el exceso de empatía puede hacer que quieras ayudar a todos, pero esto puede conducirte al agotamiento.
  3. Autoexigencia: ser perfeccionistas y muy críticas consigo mismo.
Algunos de las fortalezas que presentan este tipo de personas son:
  1. Gran capacidad de empatía: lo que permite conectar profundamente con los demás y ofrecer apoyo emocional genuino.
  2. Creatividad: parece más probable destacar en el mundo del arte, la escritura y otras actividades creativas.
  3. Intuición: posibilidad de captar detalles y matices que otros pasan por alto, lo que te permite tomar decisiones consideradas.
Estrategias para una vida más equilibrada Si crees que tienes rasgos de Personalidad Altamente Sensible, estas estrategias pueden serte útiles para vivir con mayor equilibrio.
  1. Aprende a establecer límites: decir que no, no debería hacernos sentir culpables. Reconocer tus necesidades y comunicar tus límites con claridad es clave para evitar el agotamiento emocional.
  2. Practica la autorregulación emocional: explora herramientas como la meditación, la respiración profunda o el journaling (escritura reflexiva), para manejar el estrés y las emociones intensas.
  3. Crea entornos que favorezcan tu bienestar: ajusta tu espacio para que sea cómodo y tranquilo. Un lugar ordenado y acogedor puede ayudarte a recargar energías.
  4. Rodéate de personas que te comprendan: construir relaciones saludables con personas que respeten tus emociones es fundamental. Hablar de cómo te sientes con amigos o familiares cercanos puede fortalecer esos lazos.
  5. Da espacio a la creatividad: dedicar tiempo a actividades creativas no solo es un desahogo emocional, sino que también puede ser una manera de canalizar tu sensibilidad de manera positiva.
  6. Busca apoyo profesional si lo necesitas: no tienes que hacerlo todo solo. Un psicólogo puede ayudarte a explorar tus emociones y desarrollar estrategias personalizadas.

Conclusión

Ser una persona con una personalidad altamente sensible no debe ser motivo de preocupación ni una etiqueta que te defina por completo. Más bien, es un rasgo que, cuando se comprende y se gestiona adecuadamente, puede convertirse en una valiosa fortaleza. Si te has sentido identificado con lo que has leído, recuerda que no estás solo. La sensibilidad no es una debilidad, sino una manera única de percibir el mundo con profundidad y empatía. Existen estrategias y enfoques que pueden ayudarte a vivir con mayor equilibrio y bienestar. En Anam Psicología, te acompañamos en el proceso de autoconocimiento y desarrollo personal, ofreciéndote herramientas para que aprendas a gestionar tu sensibilidad y convertirla en un recurso que enriquezca tu vida.