Neuropsicología

Estamos especializados en la evaluación y tratamiento de las condiciones asociadas al sistema nervioso central. Abarcamos todas aquellas patologías que afectan al cerebro: alteraciones y disfunciones del neurodesarrollo, enfermedades neurodegenerativas traumatismos craneoencefálicos, ictus, tumores cerebrales y anoxias, entre otros. Evaluamos y rehabilitamos las funciones cognitivas.

Una evaluación neuropsicológica nos permite conocer cómo funciona el cerebro en varios dominios. Tanto los factores neurocognitivos (funcionamiento del cerebro) como psicológicos y mentales se evalúan dentro de este tipo de intervención. Puede ser de gran ayuda para orientar la terapia de neurorrehabilitación.

Las pruebas que se realizan se componen principalmente de una entrevista y una serie de pruebas y cuestionarios basados en el rendimiento. La mayoría de las pruebas son de papel y lápiz, algunas requieren respuestas verbales para confirmar lo que el paciente ha contestado. Por lo general la evaluación neuropsicológica se divide en tres partes: la entrevista, las pruebas psicológicas (como se indicó anteriormente) y las pruebas neurocognitivas. La entrevista consistirá en que el examinador le haga preguntas sobre sus síntomas e información de antecedentes relevantes. La parte psicológica de las pruebas puede determinar la presencia de trastornos de la personalidad o trastornos de salud mental.

Cubrimos un campo de actuación muy amplio basado en diferentes estrategias y técnicas de intervención terapéutica para disminuir las secuelas cognitivas, conductuales y emocionales producidas por el daño cerebral hasta lograr la integración social y bienestar del paciente.

El objetivo es mejorar las funciones cognitivas y las capacidades del paciente: orientación, atención, praxias, gnosias, memoria y funciones ejecutivas (organización, planificación, abstracción, solución de problemas, etc.).

Los pacientes y sus familiares pueden presentar problemas emocionales y psicológicos derivados de los déficits cognitivos y motores que afectan a su capacidad de relación con el entorno. En estos casos se interviene psicológicamente para enfrentar el duelo de sufrir una patología neurológica. Intervenimos igualmente para tratar los aspectos conductuales reactivos al daño cerebral.